La ministra de Igualdad ha explicado que la decisión de equiparar el aborto al resto de las intervenciones quirúrgicas que establecen la mayoría de edad para decidir en los 16 años, el Gobierno ha querido "proteger la salud de la jóvenes y evitar a toda costa la clandestinidad e inseguridad que pueda ponerlas en riesgo". Pero también defiende que los padres de una menor que vaya a abortar deban ser consultados.
Desde la Iglesia católica se ha advertido a los políticos creyentes de que si apoyan la nueva Ley del Aborto están en "pecado público" y no podrán comulgar.
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